Un efecto óptico para intentar reducir los excesos de velocidad.
La empresa Vegamálun GÍH es la responsable de la idea que está a prueba en el pueblo de Ísafjörður (Islandia).
No hay duda de que a muchas personas este tipo de iniciativas les parecerá una estupidez, pero la verdad es que hay que aplaudir cualquier esfuerzo encaminado a aumentar la seguridad vial en cualquier medida.